La Almohada de Jacob Jacob y Esaú eran gemelos. Esaú salió primero del vientre de su madre y Jacob salió aferrada su mano al talón de su hermano. Cuando crecieron, sus vidas quedaron definidas. Esaú era cazador y le gustaba estar al aire libre en la campiña, mientras que Jacob era un hombre quieto, pensativo y calculador y amaba la comodidad del hogar. Rebeca tenía preferencia por su hijo Jacob y le había contado que cuando ambos (Esaú y Jacob) estaban en su vientre se peleaban y Dios le reveló que en el futuro el mayor serviría al menor. Con esta revelación Jacob esperó el momento oportuno, y un día en que su hermano venía cansado y hambriento, hizo que éste le vendiera el derecho de su primogenitura a cambio de un plato de lentejas que había guisado. Después de haber obtenido el derecho de la primogenitura, Jacob ayudado por su madre, consiguió con astucia y engaño la bendición de Isaac, su anciano padre que estaba ciego por la edad. Esaú juró vengarse de su
José Núñez Grullón