Antes de que los siete ángeles tocaran las siete trompetas de los juicios divinos, hubo un silencio como de media hora en el cielo.
Ese silencio fue el preludio de los juicios de Dios.
El silencio del pueblo es similar a ese silencio divino.
Llega el día cuando la gente no aguanta más abuso y estalla una revolución demandando justicia y reivindicaciones sociales o se cae en la anarquía total.
Recordemos el pueblo de París, sumido en un silencio total por el régimen absolutista, hasta el día que hastiado de tanta opresión decidió forjar su propio destino.
Al pueblo le bastó un solo día para rebelarse contra la tiranía y la opresión, un solo día fue suficiente para liberarse del régimen absolutista y empezar a forjarse una nación basada en la justicia social.
De esta revolución surgió la
Declaración de los derechos del hombre y del ciudadano.
Esta proclama sirvió de inspiración para la Declaración Universal de los Derechos Humanos, adoptada por las Naciones Unidas, el 10 de diciembre de 1948, precisamente en París, Francia.
Qué te parece, Toño?
José Núñez Grullón
Ese silencio fue el preludio de los juicios de Dios.
El silencio del pueblo es similar a ese silencio divino.
Llega el día cuando la gente no aguanta más abuso y estalla una revolución demandando justicia y reivindicaciones sociales o se cae en la anarquía total.
Recordemos el pueblo de París, sumido en un silencio total por el régimen absolutista, hasta el día que hastiado de tanta opresión decidió forjar su propio destino.
Al pueblo le bastó un solo día para rebelarse contra la tiranía y la opresión, un solo día fue suficiente para liberarse del régimen absolutista y empezar a forjarse una nación basada en la justicia social.
De esta revolución surgió la
Declaración de los derechos del hombre y del ciudadano.
Esta proclama sirvió de inspiración para la Declaración Universal de los Derechos Humanos, adoptada por las Naciones Unidas, el 10 de diciembre de 1948, precisamente en París, Francia.
Qué te parece, Toño?
José Núñez Grullón
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