Asombra que en nombre del protestantismo se reniegue del llamado “aborto terapéutico”, porque desde hace muchos años los cristianos adscritos a este credo lo han aceptado y miles de sus feligreses lo han practicado cuando ha sido necesario. Lo que no aceptan los protestantes es el aborto, puro y simple, como método de planificación familiar. Pero esta no es la cuestión que está planteada en la observación que el presidente Danilo Medina Sánchez hizo a la ley contentiva del Código Penal. También asombran los términos utilizados por el principal ejecutivo de la Confederación de Unidad Evangélica (CODUE) para referirse a quienes apoyan la decisión del presidente Medina. Según los reportes periodísticos, se dijo que las asociaciones de mujeres que endosan la observación presidencial no creen en la familia, en el matrimonio, ni en la vida. Olvidan los directivos de CODUE que el movimiento feminista ha hecho posible la visibilidad de las mujeres en un mundo dominado por unos hombres que
José Núñez Grullón